Me negaba a enseñar así, sabiendo que el 96% de las participantes iban a fracasar.
A mis ganas de hacerlo diferente se unió la suerte y encontré una maestra que tenía todos los secretos que necesitaba aprender.
He pasado años y años estudiando anatomía para poder llevarlo más allá de lo que aprendí con mi ángel de la guarda que ya me puso en el verdadero camino. De este modo he podido democratizar la danza y llevarla al público adulto.
¡Y puedo decir que lo he conseguido!
Tranquila, tú no vas a tener que estudiar como yo, sólo disfrutar al 100% de mejorar tu postura, tu flexibilidad, esculpir tu cuerpo, descubrir tu musicalidad, mejorar tu coordinación, en suma disfrutar de bailar.